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Lolo Jones, la atleta estadounidense que ha triunfado a nivel mundial como vallista, quiere cambiar de disciplina: probará suerte esta vez con el bobsleigh, un deporte de invierno en el que el atleta desciende en un trineo.

Un nuevo reto en un deporte nuevo para ella. Jones deberá bajar a toda velocidad (alrededor de 150 km. por hora) a bordo de un biplaza en los Juegos Olímpicos de Invierno de Sochi 2014, en Rusia.

Para poder competir en esta disciplina, Lolo Jones tuvo que cambiar su físico, pasando de pesar 141 libras (64 kilos) a las 165 libras (75 kg) que certificó la báscula oficial de la prueba olímpica.

Pasó de ser ágil a sumar fortaleza física y robustez. Según ella misma reconoce, "como atleta debes ser un galgo, pero para el trineo, tienes que convertirte en un pitbull o un rottweiler” declaró.

Seguramente, al finalizar la competencia, Lolo volverá a descender para llegar a su peso regular. Pero en este último tiempo, no hubo restricciones para ella: consumió 9,000 calorías diarias que las obtenía de batidos de proteínas, helados, barritas de chocolate y dulces, postres y hasta las clásicas hamburguesas bien completas.

Nadie podrá decir que ha perdido forma, su masa muscular sigue intacta, como ella ha declarado, "mis abdominales siguen estando ahí, más sólidos que antes”, dijo a los medios.

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