PALIGMED :: CADA VEZ MÁS HISPANOS DUERMEN CON SUS HIJOS

Se calcula que un 14% de los bebés estadounidenses comparten la cama con otras personas, una práctica muy poco recomendada por los pediatras, y ese número va en aumento, sobre todo en la población hispana. Pros y contras de este hábito.

Puntos Clave

Se duplicó el número de infantes que duermen con sus padres en la misma cama entre 1993 y el 2010.
Uno de los principales riesgos que implica es el síndrome de muerte súbita.
La muerte súbita, de causa desconocida, mata a 2000 infantes por año.

Una encuesta recientemente publicada realizada a 20 mil personas que cuidan bebés asegura que el porcentaje de infantes que duermen con otra persona aumentó de un 6.5% a principios de los años 90 a un 13.5% en el 2010 y los hispanos están en el grupo de mayor incidencia.

En 17 años de estudio, las minorías como hispanos y afroamericanos fueron los que más aumentaron esta costumbre, muestra la investigación. La gran mayoría de los bebés que comparten la cama duermen con sus padres (un 85%), mientras que el resto lo hace con otros adultos y chicos.

Uno de los principales riesgos de compartir la cama es que incrementa notablemente la posibilidad de muerte súbita en infantes. Para reducir el riesgo de las muertes asociadas al dormir, la Asociación Americana de Pediatría recomienda que los bebés duerman en la misma habitación que sus padres pero no en la misma cama.

"Es importante para los médicos hablar con los padres de los hábitos de sueño y evitar estos riesgos", explica una de las autoras del estudio, Marian Willinger, quien trabaja en el Instituto Nacional de Salud Infantil y Desarrollo Humano.

El síndrome de muerte súbita es una muerte inexplicada antes de que el niño cumpla el año de vida. Acorde con datos de los Centros de Salud y Control de Enfermedades (CDC) unos 4000 bebés mueren durmiendo cada año sin causa conocida, y la mitad de ellos entran en lo que se conoce como el síndrome de muerte súbita, el cual representa la primer causa de muerte en bebés de menos de un año. En Estados Unidos, se aconseja a todos los padres que no duerman con sus bebés de menos de 3 meses de edad.

A pesar de esto, la mayoría de los padres aseguran no haber sido informados sobre los riesgos de compartir la cama con sus hijos, asegura un informe publicado esta semana en el journal JAMA Pediatrics.

Si no tienes seguro y estás preocupada por tu niño, seguramente puedas registrarlo en el Programa de Seguro para Niños (CHIP, por sus siglas en inglés). Puedes buscar información en el mercado de seguros de salud de tu estado.

El consejo del médico hace una diferencia

El estudio muestra que en los casos donde fueron informados, un 34% menos de los padres y cuidadores durmieron con sus bebés en la misma cama. Lo cual refuerza la idea de cuán importante es la prevención y la comunicación abierta entre profesionales y pacientes.

La prevención es uno de los ejes fuertes de la Ley de Cuidado de Salud a Bajo Precio. Por eso, hay una amplia gama de exámenes preventivos a los que podrás acceder de manera gratuita o a un costo moderado. Conoce más de estas opciones en el Centro de Seguros Médicos.

¿Por qué eligen compartir la cama?

En Estados Unidos están quienes defienden y quienes critican el compartir la cama con un bebé.

Los partidarios de compartir la cama consideran (y algunos estudios respaldan sus creencias) que dormir con el bebé facilita la lactancia durante la noche, los ayuda a dormir mejor y mejora la relación entre padres e hijos.

Entre los detractores de esta idea además de los motivos médicos mencionados, alegan temas psicológicos, ya que la intimidad de la pareja podría verse afectada y el hecho de tener el bebé en la misma cama podría aumentar los celos en los demás niños de la casa.

¿Cómo sacar al bebé de la cama?

Para hacer la transición, los expertos recomiendan colocar un moisés, un corralito o una cuna al lado de la cama de los padres y luego pasar a su propio cuarto.

Sin embargo, el lugar donde duerme su hijo es una decisión personal. Consulta con el pediatra y analiza las diferentes alternativas.

Hoy en día, con la nueva Ley de Seguros de Salud a Bajo Precio, todos pueden tener y acceder a un seguro médico. No importa la condición médica que tengas, uno de los mandatos de la Ley de Cuidado de Salud a Bajo Precio, que promulgó el presidente Barack Obama en marzo de 2010, prohíbe a las aseguradoras discriminar a personas con condiciones preexistentes, y también elevar las primas en caso de enfermedad.

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