Ejemplo de garra

El nombre de Joan Steel es un claro sinónimo de lucha. Nos referimos a esta mujer sudafricana de 37 años, quien en 1997 sufrió un aparatoso choque que le cambió la vida. Ella se dirigía rumbo a un concierto de piano que iba a ofrecer, cuando sucedió lo peor.

Amputación de una pierna

El día de la tragedia

De repente, uno de los neumáticos del vehículo en el que viajaba estalló, causando que éste diera más de cinco vueltas. Cuando Steel se dio cuenta de lo que había pasado, notó que uno de sus brazos estaba a punto de desprendérsele de su cuerpo. En la imagen el auto de Joan tras el accidente.

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Malas noticias

Tras ser llevada a urgencias, donde fue evaluada por personal médico, Joan recibió una noticia poco alentadora, pues a causa del severo daño que le causó el fuerte impacto se le comentó que tendría que despedirse de su extremidad. Sin embargo ella optó por aferrarse a su brazo para así no poder despedirse de su carrera como concertista.

Una operación complicada

El esfuerzo de los médicos por salvar el brazo de Steel fue loable. En una operación que duró varias horas lograron colocarle una varilla de acero en su interior. Además aplicaron varios injertos de piel. Aún así el pronóstico para que ella volviera a usar su brazo como solía hacerlo era muy reservado.

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El mundo se vino abajo

Cuando Joan fue informada que su brazo quedaría inservible, le fue inevitable estallar en una profunda depresión. “Estaba devastada y frustrada porque no podía doblar mi brazo y parecía ajeno a mí”, recuerda. Es como si el mundo se le hubiera venido encima.

Pudo salir adelante

No obstante, ella desafió a los médicos y como una manera de poder salir a las frustraciones se refugió en el entrenamiento de pesas. Ahora, a 17 años de aquel duro percance, ella es toda una entrenadora personal y su físico luce totalmente transformado.

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Trasciende en su nueva vida

Incluso, los deseos de seguir adelante y superarse llevaron a Joan a sobresalir en su nueva vida, por lo que se trasladó a vivir a Londres, Inglaterra donde realizó una carrera de fitness. Motivada por su hija también se metió al certamen de belleza Miss Galaxy Universe donde dio la sorpresa al quedar en quinto lugar de 90 participantes.

Dispuesta a ayudar

Y aunque ya no se dedicó al piano, el historial de vida de Joan ha servido como una eterna fuente de inspiración para seguir en el ruedo. “Mi objetivo es ayudar (con mi testimonio) a otras personas. Soy madre soltera y realmente creo en la perseverancia y en tener una actitud positiva”, comenta.

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Dosis de vida

El ejemplo de Steel es de esos que sirven como una inyección de ánimos para aquellas personas, que sin pasar por una fuerte experiencia como ella, sienten que todo se ha derrumbado. Ante esto la motivación es gasolina pura.

Motivación

De acuerdo con Patricia Ramírez, quien es psicóloga del deporte y conferencista, la motivación “es la fuerza interior que predispone y arrastra hacia un objetivo. Es ese estado interno que te activa, te guía y mantiene para que llegues a tus metas”.

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¿Cómo conseguirla?

Historias como la antes mencionada siempre sirven para reflexionar, conocerse a uno mismo, y analizar puntos fuertes y débiles para trabajar y poner soluciones. Como una medida de reforzamiento, Ramírez sugiere hablarle a la mente de los objetivos a los que se quieren llegar. “La idea es superarse a sí mismos”, agrega.

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Otras medidas que ayudan

Al igual que Steel, tú puedes encontrar soluciones a tus adversidades. Otras claves a considerar son decidir un plan de acción, no desaprovechar la energía física y mental, no caer en la victimización, esforzarse, refrescarse el objetivo en los malos momentos, ponerle acción al trabajo y rodearse de optimismo.

¿Y si fallo?

Si tienes ganas de renunciar y colgar la toalla, analizar los pasos descritos te ayudará a darte cuenta en qué has fallado. Al final no existen los fracasos, sino el aprendizaje constante. Lo importante es seguir con el esfuerzo y el optimismo. Y a ti, ¿qué te detiene a no salir adelante?

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