Los impuestos a la comida chatarra reducen el consumo

MiDieta

Por HealthDay
Publicado:


Gravar los refrescos y las comidas ricas en grasas saturadas, y proveer subsidios para las frutas y las verduras, podría animar a las personas a cambiar sus hábitos alimentarios, y posiblemente mejorar su salud, según un estudio reciente.

Investigadores de Nueva Zelanda analizaron 32 estudios anteriores, y concluyeron que habría un declive de un 0.02 % en el consumo de comidas grasas por cada aumento del 1 % en el precio. También determinaron que un aumento de un 10 % en el precio de los refrescos reduciría el consumo en un 1 a un 24 %.

Una reducción del 10 % en el precio de las frutas y de las verduras aumentaría el consumo en un 2 a un 8 %, según los hallazgos, que aparece en la edición del 11 de diciembre de la revista PLoS Medicine.

Sin embargo, los investigadores hallaron evidencia de que unos precios más bajos en las frutas y en las verduras podrían llevar a las personas a comprar cantidades más pequeñas de otros alimentos sanos, como el pescado, y cantidades más grandes de productos menos sanos.


Queremos Conocer su Opinión

¿Cómo califica el contenido que acaba de leer/ver?

¿Qué tanto me motiva a vivir saludable?

Yo soy...

Proveedor de Salud
Administrador o Recursos Humanos – Empresa
Asegurado
Corredor de Seguros
Ninguna de las Anteriores


Los posibles beneficios de salud de los impuestos sobre los refrescos y otras estrategias para reducir las compras de los alimentos perjudiciales para la salud y aumentar el consumo de frutas y verduras podrían ser mayores entre las personas de ingresos más bajos que entre los que tienen ingresos más altos, hallaron.

Esto sugiere que esas estrategias para fijar los precios de los alimentos tienen el potencial de reducir las desigualdades dietéticas, afirman Helen Eyles y colegas de la Universidad de Auckland y de la Universidad de Otago, en Wellington, en un comunicado de prensa de la revista.

Las dietas ricas en azúcar y grasas saturadas contribuyen al desarrollo de enfermedades crónicas, como las enfermedades cardiovasculares y la diabetes.