Antojitos satanizados

Es muy común que cuando se habla de antojitos mexicanos surja la idea de que engordan, son grasosos, muy picantes, altos en calorías y de bajo contenido nutricional. Incluso entre los mexicanos se refieren a varios de ellos como “vitamina T”, platillos como tacos, tamales, tlacoyos o tostadas y que muchos aseguran son los responsables del sobrepeso, obesidad, problemas de colesterol, triglicéridos y otros padecimientos.

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Tentaciones

Sopes, flautas, gorditas o enchiladas, sólo pensar en ellos hace agua la boca. Los antojitos mexicanos son deliciosos, pero hay que saber combinarlos y cuidar la cantidad, variedad y forma de preparación para evitar que hagan estragos en nuestra salud. Aquí ponemos bajo la lupa algunas de las creencias que hay alrededor de los antojitos mexicanos:

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1. Engordan

Muchas personas tienen la creencia de que los alimentos se dividen en dos grupos: los que engordan y los que no. La comida mexicana tiene pésima fama y se dice que está diseñada para agradar al paladar más que para mantener la línea, en realidad lo que engorda son las cantidades excesivas que se consumen. El secreto está en moderar la ingesta y acompañar de fibra.

Pambazo irresistible

De acuerdo con un reporte de la Procuraduría Federal del Consumidor (PROFECO), un pambazo de papa con chorizo contiene: 210 calorías + 45 calorías por cada cucharada de aceite + media taza de papa 70 calorías + 100 calorías en una porción de 30 gramos de chorizo. En total 425 calorías.

Pozole y sus calorías

Es todo un deleite comerse un pozole, un plato grande con carne de cerdo contiene: 420 calorías de maíz + 140 calorías en una taza de consomé + 25 calorías de verduras como rábano, cebolla y lechuga + 300 calorías del aporte de grasa de la carne. 885 calorías aproximadamente. Es mejor si la carne es magra y el caldo está desgrasado.

Crujientes tostadas

Dependiendo como la prepares, cada tostada frita contiene 115 calorías + una cucharada de crema 45 calorías + queso rallado 75 calorías. 235 calorías. Una opción para reducir el valor energético es comprar tostadas horneadas o dorar la tortilla en un comal para evitar que estén fritas.

2. Es grasosa

No todo son “fritangas” (alimentos fritos, muy grasosos), mejor conocidas como “garnachas”, depende mucho de la preparación. Los tlacoyos, quesadillas, sopes o gorditas son igual de deliciosos asados en el comal, sin grasa y se pueden acompañar de ensalada de lechuga, nopales, flor de calabaza, hongos y quintoniles.

Grasas y su impacto

De acuerdo con la Administración de Drogas y Alimentos de EE.UU. (FDA), las grasas ‘trans’ son las que se forman cuando los aceites líquidos (los que se usan para cocinar) se convierten en grasas sólidas. El consumo excesivo de las grasas ‘trans’ es lo que afecta el sistema cardiovascular porque se acumulan en las arterias, afectando al torrente sanguíneo.

Quesadillas más sanas

Es mejor si la masa es de maíz, la preparan en el comal, sin aceite añadido y se acompaña de flor de calabaza y hongos, en lugar de carne o papa. Preparada con 30 g de queso panela con flor de calabaza, 2 cucharadas de frijol con requesón y 30 g de rajas con queso Oaxaca, contiene 400 calorías.

Gorditas, delicioso veneno

Las gorditas son un antojito elaborado a base de masa de maíz rellenas de chicharrón o frijol. Una sola gordita de chicharrón contiene 567 calorías, 17.2 gramos de proteínas, 41.2 g de grasa, 31.8 g de carbohidratos y 3.4 g de fibra. Si deseas consumirla, prefiérela sin freír y de tamaño pequeño.

Sopes tentadores

Los sopes, pellizcadas o picaditas son un platillo tradicional sobre el que se añaden diferentes ingredientes. Contiene un promedio de 424 calorías, 10.2 gramos de proteínas 23.4 g de grasa 43 g de carbohidratos 7 7.5g de fibra. Son mejor sin freír y acompañados de nopales, flor de calabaza o champiñones.

3. Es muy picante

Una frase popular dice “picoso pero sabroso”, prácticamente no hay comida mexicana sin chile, es usado como ingrediente básico en la elaboración de masas, líquidos y salsas. Lo cierto es que no todas las personas aguantan el picante de la misma manera y si no se está acostumbrado a él, hay que comerlo con precaución.

Picoso pero con beneficios

De acuerdo con Octavio Paredes López, autor del libro “Los alimentos mágicos de la culturas indígenas mesoamericanas”, el chile, además de su sabor inigualable, "tiene efectos anti inflamatorios, anti irritantes y ayuda a la prevención del dolor".

3. No es nutritiva

Los platillos considerados como típicos de la gastronomía mexicana, incluyen una gran variedad de cereales, legumbres y plantas. Muchos de los ingredientes son grandes fuentes de vitaminas, calcio y magnesio. Por ejemplo, el tomate, la cebolla, los nopalitos, la tortilla, los frijoles, aparte de sabor, aportan vitamina C, antioxidantes, zinc. Sin embargo, añadir queso, crema agria o freír el maíz hacen la comida poco saludable.

Moderación es la clave

La nutricionista del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Dalila Moreno recomienda moderación y comer raciones pequeñas para evitar estragos en la salud. Si se come pozole, por ejemplo, que sea de preferencia de pollo, con pocos granos de maíz y el caldo desgrasado; una o dos tostadas con poca crema para acompañarlo.

Se pueden comer pero...

Nada está prohibido, todo se puede comer, la recomendación es que no se abuse. El abuso en el consumo de antojitos mexicanos y bebidas trae como consecuencia aumento de peso, problemas de gastritis y colesterol, advierten autoridades de la Secretaria de Salud.

5. Provocan gastritis

La Asociación Mexicana de Gastroenterología asegura que este padecimiento no es sólo culpa de los antojitos, involucra varios factores. Si durante largo tiempo se ha abusado del alcohol, las grasas, especias e irritantes, se tiene una alimentación inadecuada y además hay factores de estrés, no es raro que se esté pagando las consecuencias con agruras, acidez, gases, eructos, mala digestión o sensación de dolor.

6. Ocasionan indigestión

De acuerdo con la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, la indigestión es una sensación vaga de malestar en la parte superior del abdomen o el vientre durante o después de comer y se puede desencadenar por: consumir alcohol en exceso, comer alimentos condimentados o grasosos, comer en exceso o demasiado rápido, estrés emocional o nerviosismo, tabaquismo o demasiada cafeína.

Las recomendaciones

De acuerdo con cifras de la Secretaría de Salud durante los festejos patrios, los mexicanos consumen casi el doble de calorías diarias recomendadas (2500 para los hombres y 2000 para las mujeres). La sugerencia para estas fiestas patrias es consumir alimentos en forma moderada y medir la ingesta en calorías.

Servicios de prevención

En Estados Unidos, la Ley de Cuidado de Salud a Bajo Precio promueve la atención de problemas de salud como la diabetes, la obesidad, enfermedades del corazón y otras enfermedades crónicas. En el nuevo mercado de seguros de salud que se lanza este 1 de octubre, millones de personas podrán adquirir seguros de salud a un precio accesible.