Mark Zuckerberg, el fundador de Facebook, acaba de lanzar, junto a su esposa Priscilla Chan, la Chan Zuckerberg Initiative, con el fin de, entre otras metas, avanzar en la cura de decenas de enfermedades. ¿Por qué semejante gesto? Porque, según dijo en una carta abierta a su beba recién nacida, quiere un mundo mejor para ella.
Esa suma significa el 99 por ciento de la fortuna de Zuckerbeg, que donará a lo largo de su vida. La meta es auspiciar esfuerzos filantrópicos y de investigación para "curar enfermedades".
La carta de 2,234 palabras, describe lo que Zuckerberg, de 31 años, y Chan, de 30, entienden que debe ser el camino para que su hija Max viva en un mundo mejor del que ellos están viviendo.
Y para eso, además de fomentar el conocimiento, la interacción de las personas y promover mejores comunidades, Zuckerberg y Chan dedican varios párrafos de la carta publicada en Facebook a definir lo que intentarán lograr en salud.
Los siguientes son extractos de la carta en los que el matrimonio habla de sus metas de salud a su bebita Max.
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"Consideremos la enfermedad. Hoy en día gastamos 50 veces más como sociedad tratando a personas que están enfermas de lo que invertimos en investigación para que no nos enfermemos, en primer lugar.
La medicina sólo ha sido ciencia real por menos de 100 años, y ya hemos visto curas completas para algunas enfermedades y buenos progresos para otras. A medida que la tecnología se acelera, tenemos una oportunidad real de prevenir, curar o tratar todas o la mayoría del resto de las enfermedades en los próximos 100 años.
Hoy, la mayorías de las personas mueren a causa de cinco cosas —enfermedad cardíaca, cáncer, ataques cerebrales y enfermedades infecciosas y neurodegenerativas—y podemos acelerar el progreso en éstos y otros problemas.
Una vez que reconozcamos que tu generación y la generación de tus hijos pueden no sufrir de enfermedades, tenemos una responsabilidad colectiva para enfocar nuestras inversiones más hacia el futuro, para hacerlo realidad. Tu mamá y yo queremos hacer nuestra parte.
Curar enfermedades llevará tiempo. A través de cortos períodos de cinco o diez años, parecerá que no estamos haciendo mucha diferencia. Pero a largo plazo, las semillas plantadas crecerán y, un día, tú y tus hijos verán lo que ahora sólo podemos imaginar: un mundo libre de enfermedad".
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